En julio de 2021 el 60% de los parados eran mujeres, es decir, dos millones frente a 1,4 millones de hombres
La igualdad salarial hace referencia a la condición por la que los individuos que realizan trabajos de las mismas características, deben recibir la misma remuneración. Sin tener en cuenta condiciones de género, raza, orientación sexual o cualquier otra categoría.
Sin embargo, este término sigue siendo una tarea pendiente entre las empresas españolas y se denota una clara brecha entre los trabajadores de distintas condiciones.
Por ello, hoy dedicamos el artículo de nuestro blog a hablar sobre la igualdad salarial y la situación real en España.
Normativa de la igualdad salarial
Según el Estatuto de los Trabajadores, los empresarios están “obligados a pagar por la prestación de un trabajo de igual valor la misma retribución, satisfecha directa o indirectamente, y cualquiera que sea la naturaleza de la misma, salarial o extrasalarial, sin que pueda producirse discriminación alguna por razón de sexo en ninguno de los elementos o condiciones”.
Mientras que la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, garantiza en el art.5 el principio de igualdad de trato y de oportunidades de acceso al empleo en la formación, promoción y condiciones de trabajo, entre las que se incluyen las retributivas.
Términos que, por supuesto, se añaden al art.14 de la Constitución Española, por el cual todos los españoles “son iguales ante la ley”.
Brecha salarial por género
Sin embargo y pese al crecimiento progresivo del empleo desde la cuarentena, la desigualdad por género en el mercado laboral no evoluciona. Y es que, por mucho que aumenten las contrataciones a mujeres, los tipos de contrato continúan siendo temporales y con sueldos inferiores al de los hombres.
Así lo reflejan los datos recogidos en 2019, según lo cuales el porcentaje de mujeres que fueron contratadas para un periodo de duración determinada fue de aproximadamente un 28%. Mientras que, en el caso de los hombres, los datos rondaban el 23%.
Además, se encuentra el problema de las áreas de trabajo que han quedado relegadas a las mujeres. De manera que, mientras que en la industria, la construcción y la tecnología predomina la presencia masculina; en la hostelería, el comercio y los cuidados, lo hace la femenina. Siendo este uno de los motivos por el que, cada año, las mujeres cobran de media 5.726 euros menos que los hombres.
De este modo, a la hora de hablar de desempleo, también destaca el porcentaje de mujeres frente al de hombres. En julio de 2021 el 60% de las personas paradas en España eran de género femenino, frente al 40% masculino. Lo que supuso un total de 0,6 millones de diferencia.